La ley bases en discusión en el congreso actualmente y con media sanción por parte de la cámara de diputados aún en esta versión reducida entraña una cantidad de medidas que ponen en grave riesgo el trabajo de calidad, la industria y la posibilidad de pensar una sociedad con mínimos niveles de bienestar. La posibilidad de legalizar el trabajo informal iguala “hacia abajo” las condiciones de trabajo actuales, ya por demás precarias.
Esta ley va acompañada de un paquete impositivo que no es más que la vuelta, duplicando las personas alcanzadas, del impuesto a las ganancias y la rebaja de impuestos (bienes personales) al 5% de la población más rica de nuestro país y la exención de impuestos a las grandes empresas por 30 años poniendo en desventaja a las medianas y pequeñas a las que no se les tiene consideración alguna.
La discusión se desarrolla actualmente en el Senado. Desde el Frente de Asociaciones de Base hemos decidido llevar adelante una pregunta a los tres representantes de nuestra provincia en esa cámara legislativa como forma de hacer pública su opinión sobre los distintos aspectos en discusión y su posición al respecto.
PREGUNTEMOS A NUESTRXS SENADORES: ¿CUÁL ES SU OPINIÓN Y POSICIONAMIENTO SOBRE LA LEY BASES?
Para llevar adelante esta acción desde ADIUNPAZ te informamos los 3 nombres y mails de esos representantes y un texto base para que comencemos ya mismo a enviar las consultas puesto que el debate en comisiones se encuentra en desarrollo (como sindicato, también enviaremos un mail a lxs senadores en el mismo sentido).
La intención es que cada docente como, ciudadanx preocupado por las consecuencias de esta ley y del futuro común, le escriba a cada unx de lxs senadorxs que a continuación detallamos:
Si vivís en Provincia de Buenos Aires:
Maximiliano Abad maximiliano.abad@senado.gob.ar
Eduardo de Pedro eduardo.depedro@senado.gob.ar
Juliana Di Tullio juliana.ditullio@senado.gob.ar
Si vivís en Ciudad de Buenos Aires:
Martin Lousteau martin.lousteau@senado.gob.ar
Mariano Recalde mariano.recalde@senado.gob.ar
Guadalupe Tagliaferri guadalupe.tagliaferri@senado.gob.ar
A continuación (y en adjunto) compartimos un texto sugerido que podemos enviar a lxs senadorxs para que respondan sobre su opinión y posicionamiento:
Señorx senadorx
Como docente de una universidad nacional, la UNPAZ, atravieso una profunda preocupación por las consecuencias de la ley “bases” en relación con nuestro futuro común.
Más allá de las consideraciones que compartiré a continuación, desearía me haga conocer su opinión en relación a la misma y su posición al momento de ser sometida a votación.
Las universidades en nuestro país nacieron con el objeto de acompañar su crecimiento. El devenir de la historia las ha hecho instrumentos imprescindibles para que ese crecimiento sea desarrollo sostenido a lo largo del tiempo.
En el proyecto aprobado en la Cámara de diputados se evidencia una fuerte propensión a la promoción de una economía primaria extractivista y exportadora. Las consecuencias de promover esa forma de creación de riqueza para las personas más jóvenes de nuestra sociedad, y en particular profesionales egresados de nuestra universidad, conllevan dificultades para insertarse en procesos que agregan valor a nuestra producción como la industria y la innovación tecnológica con su consecuente mejora de la calidad de vida propia y de su comunidad.
El debilitamiento de los controles sobre el trabajo y la condonación de deudas con el estado por infringir la ley imponen, además de un modelo de deterioro social, una contradicción con el relato de la crisis actual al ceder ingresos estatales útiles para otros fines. Para quienes vivimos de nuestro trabajo resulta bochornoso pensar un país con relaciones laborales donde se legaliza prácticamente el trabajo informal -“en negro”- en las unidades económicas de hasta 5 personas. Con este proyecto las condiciones de trabajo en Argentina y en pleno siglo XXI donde los avances tecnológicos habilitan pensar un mayor bienestar para sus habitantes cambian para deteriorarse profundamente arrastrando así también a las familias de las personas que caigan en esa situación. En la Argentina, por el contrario, debería darse el ejemplo de comenzar por premiar el esfuerzo de quienes trabajan y castigar la evasión de quienes se apropian de ese esfuerzo y usted tiene el poder de enmendar semejante inequidad.
Al mismo tiempo el blanqueo de fondos indiscriminado potencia la posibilidad de la generalización de una economía marginal violenta que se ve facilitada por el contexto de la pobreza que según el presidente alcanza hoy el 60% de la población. De manera simultánea se propugna la casi duplicación de las personas que tributan el impuesto a las ganancias, es decir más trabajadores pagaremos más impuestos mientras capitales especulativos y grandes empresas ven disminuida (reducida), mediante reducción de la alícuota de bienes personales, o eliminada su carga tributaria, mediante el blanqueo, y las penalidades en los casos de incumplimiento. Resulta a todas luces injusto que los que menos tienen más paguen y está en sus manos corregirla.
La cristalización de la reducción del poder de compra de las jubilaciones -tal como está sucediendo con los sueldos universitarios- no permite vislumbrar un futuro venturoso para las mayorías populares, mucho menos para quienes no han tenido aportes (a cuyos empleadores ahora se libera de culpa) y mucho menos para las mujeres que según el presidente tienen “la tarea” de criar hijos pero nulo reconocimiento social -y ahora legal- a ese trabajo de reproducción de la sociedad. También en su mano, la que vota o no esta ley, esta corregir esta injusticia.
Lamentablemente la base del modelo que propone la ley no hace referencia alguna a la promoción de la tecnología, la ciencia o la educación, pilares indispensables de cualquier futuro mejor que pretendamos para nuestros hijos.
Agradeciendo su atención por la lectura de estas palabras reitero mi solicitud de conocer su opinión al respecto y la posición que adoptará en tanto representante de mi provincia al momento de ser sometido a votación este proyecto de ley.
